Se trató de la cuarta ronda de negociaciones luego del plebiscito del 4 de septiembre, donde el 62 por ciento de la población rechazó un proyecto de carta magna escrito por una convención que había sido elegida mediante voto popular.
A partir de entonces las organizaciones políticas buscan los mecanismos para dotar al país de una nueva ley fundamental que sustituya a la impuesta en 1980, durante la dictadura militar.
Tras finalizar el encuentro celebrado en la antigua sede del Congreso, el presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Soto, valoró el avance de los diálogos y dijo que se está más cerca de un entendimiento.
Los partidos miembros de la coalición de gobierno presentaron la propuesta de elegir una convención paritaria, con la participación de candidatos independientes, pero avalados por un partido político, y asientos reservados para los pueblos indígenas.
Con el objetivo de acompañar y asesorar a los encargados de redactar el texto, estaría un grupo de expertos designados por el congreso.
La coalición opositora de derecha Chile Vamos propone en cambio que la tarea de crear la futura constitución recaiga en un equipo mixto, creado a partir de la representación proporcional en el parlamento, más especialistas en ciencias jurídicas y otras materias afines.
De acuerdo con la ministra Secretaria General de la Presidencia, Ana Lya Uriarte, la reunión de este jueves fue exitosa y esperanzadora.
Agregó que todos mostraron las mejores intenciones para el futuro del país y concuerdan en seguir avanzando hasta lograr la habilitación de un nuevo proceso constituyente.
El viernes habrá un diálogo bilateral entre los partidos de gobierno y Chile Vamos y el próximo lunes se reanudan las negociaciones con las demás formaciones políticas.
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