En un comunicado conjunto, esas agrupaciones destacaron que desde el inicio del cese de las hostilidades, en abril último, el número de víctima disminuyó 60 por ciento.
Desde entonces, la cantidad de combustible que ingresa al puerto de Hodeida se cuadruplicó, lo cual ayuda a mantener la funcionalidad adecuada y el acceso a los servicios públicos, incluidos los tratamientos médicos críticos, resaltaron.
En ese sentido, precisaron que la reanudación de los vuelos comerciales desde Sanaa ayudó a 21 mil yemenitas a acceder a atención médica vital, buscar oportunidades de educación y reunirse con sus familiares en el extranjero.
Si bien ya se lograron avances importantes, se necesita más tiempo para garantizar que la población pueda comenzar a reconstruir y recuperar sus vidas, consideraron.
Al respecto, alertaron que de reiniciarse, el conflicto amenaza el desarrollo futuro de Yemen.
Entre los firmantes están las ONG Oxfam, el Centro de Estudios de Derechos Humanos de Yemen y Save the Children.
Según la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios más de 23 millones de yemenitas de un total de 31 millones necesitan asistencia humanitaria o protección, pero las agencias de la ONU sólo pueden proporcionar ayuda a 11,6 millones cada mes.
La guerra comenzó en 2014, cuando los rebeldes hutíes se levantaron en armas y ocuparon grandes extensiones del país, incluida su capital, Sanaa.
Al año siguiente una coalición árabe, encabezada por Arabia Saudita, intervino en el conflicto en respaldo del entonces presidente Abd Rabbu Mansour Hadi.
ymr/rob
