En el discurso de clausura de la ceremonia conmemorativa de la efeméride en el Palacio Quirinal, el jefe del Estado señaló que ‘atravesamos un pasaje estrecho y difícil’, por lo cual, añadió, ‘la fiesta de hoy porta consigo un llamado aún más fuerte a la unidad’.
En ese sentido, transmitió sus parabienes a los trabajadores, especialmente a quienes perdieron el empleo en estos meses por el cierre de muchas actividades productivas y otros afectados laboralmente por la pandemia, así como a quienes viven en condiciones de pobreza.
La batalla por el trabajo es una prioridad la cual debe unir los esfuerzos de todos, trabajadores y empresarios, instituciones y fuerzas sociales, el mundo de las profesiones, la investigación y la cultura, indicó.
El mandatario precisó que la pandemia golpeó duramente muchos sectores de la economía, con secuelas importantes para trabajadores autónomos y los contratados a tiempo determinado en las áreas de comercio, turismo, restauración alimentaria, ferias, cultura y transporte.
Al referirse a la agudización de viejas desigualdades y desequilibrios sociales, el presidente dijo que ‘ese será una de los legados más amargos de la crisis que tendremos que superar’.
En la ceremonia intervinieron también los presidentes de la Asociación Nacional de Trabajadores Ancianos,Eduardo Patriarca, y de la Federación Nacional de Maestros del Trabajo, Elio Giovati, respectivamente.
Además, el presidente de la Federación Nacional de Caballeros del Trabajo, Maurizio Sella, y el ministro del Trabajo y de las Políticas
Sociales, Andrea Orlando.
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