El ensayo tuvo como objetivo elevar la eficiencia combativa y el poderío de los misiles cruceros estratégicos de largo alcance, desplegados en las unidades de operación de armas nucleares y confirmar la estabilidad técnica del sistema de uso operacional en su conjunto.
Dos misiles lanzados navegaron 10 mil 234 segundos por la órbita elíptica establecida en el espacio aéreo sobre el Mar Occidental de Corea, y acertaron el blanco a una distancia de dos mil kilómetros, indicó la Agencia Central de Noticias de Corea.
Tras la prueba, Kim apreció la alta capacidad de reacción de las fuerzas armadas nucleares de la República Popular Democrática de Corea (RPDC), y su efectividad para la batalla real.
El mandatario instruyó seguir ampliando el espacio de uso de las fuerzas estratégicas nucleares con miras a disuadir cualquier amenaza bélica que pueda llegar, y manifestó la esperanza de que las fuerzas combativas de la RPDC completarán el estado de enfrentamiento militar con exactitud y seguridad.
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