Se trata del segundo encuentro de su tipo, el primero se realizó en México, y en esta ocasión el canciller de este país dijo que el interés del gobierno de López Obrador era centrarlo en el tema del tráfico de armas procedente de Estados Unidos que alimenta a las bandas del crimen organizado.
Fuentes de la delegación mexicana dijeron que Ebrard inició su visita de trabajo a Washington con una reunión bilateral con el secretario de Estado Blinken.
Tuvieron un encuentro privado al que le siguió una reunión con sus equipos de trabajo, en la cual estuvieron del lado estadounidense Blinken, Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional, y John Kerry, enviado presidencial especial de Estados Unidos para el Clima, entre otros
Del lado mexicano, además de Ebrard, la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Icela Rodríguez, el embajador Esteban Moctezuma, y los funcionarios Roberto Velazco, María de Haas, Ana Luisa Fajer y Daniel Millán.
En ambas reuniones iniciales, el canciller Ebrard respondió a las palabras de bienvenida e introducción de los temas expuestos por Blinken, destacó los avances en confiscación de armas y pidió intensificar esta labor dado que en 10 condados estadounidenses se concentra buena parte del trasiego de armas.
También tocó el tema de la migración que preocupa a los dos países con una larga frontera, y enfatizó la visión del presidente Andrés Manuel López Obrador de que el fenómeno del éxodo indocumentado debe atenderse en sus causas sociales y la colaboración económica y de inversiones entre ambos gobiernos.
Además, conversaron sobre la importancia de avanzar en la fabricación en México y Norteamérica de baterías de autos, imprescindibles para la transición de la industria automotriz a la energía eléctrica.
La reunión transcurre a puertas cerradas y se espera que en algún receso o a su final se den más detalles de lo conversado en esta jornada.
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