Mediante un comunicado, la Coalición por los Bosques, calificó los cambios en la Ley 5723/2016 de un “grave retroceso” en materia de protección del medio ambiente y anunciaron que analizan medidas a tomar para evitar su aprobación.
La Cámara de Diputados sancionó el pasado 12 de octubre y remitió para su estudio en el Senado modificaciones a los artículos cuatro y seis para la legislación que establece la preservación del parque nacional Médanos del Chaco, con unas 605 mil 75 hectáreas.
La nueva normativa posibilitaría a empresas privadas realizar trabajos de prospección, exploración y explotación de hidrocarburos y minerales, algo que en 2019 denegó la Corte Suprema de Justicia.
Bajo el hashtag #losmedanosnosetocan cientos de ciudadanos de este país austral visibilizaron la importancia de rescatar al parque de las intenciones de las entidades detrás del proyecto de explotación.
El senador Miguel Fulgencio Rodríguez, de la concertación de partidos de izquierda Frente Guasu, cuestionó por su parte este martes la falta de preocupación de los impulsores de la nueva norma por los indígenas.
Afirmó que se registraron avistamientos en el parque nacional de comunidades sin contacto aún con la civilización y opinó que el bienestar de esos pueblos originarios debe ser preservado.
“Me extraña que la gente se preocupe de Tiríka, del leopardo, de todo el mundo menos de esas personas”, expresó el político, quien integra la Comisión de Asuntos Indígenas del Senado.
La Organización de Conservación y Desarrollo Sostenible del país (Opades) exigió antes a través de sus perfiles oficiales en las redes sociales el veto inmediato a cualquier documento que ponga en riesgo a “una importante, única y biodiversa área silvestre protegida”.
El riesgo de erosión ecológica es muy elevado y cualquier modificación o uso inadecuado puede acarrear una catástrofe, señaló.
Además de la flora, según especialistas y amantes de estos paisajes, la fauna también resulta una de las riquezas de los médanos del Chaco.
El parque nacional abarca parte de los departamentos de Boquerón y Alto Paraguay, fronterizo con Bolivia, y fue creado por Decreto 2726/2004 con el propósito de proteger una mezcla de bosques con arbustos que no se encuentran en ningún otro lugar.
A los bienes naturales, los expertos agregan los recursos históricos, pues abundan en el lugar las referencias a la guerra del Chaco de 1932 a 1935.
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