La presidenta de la Unión Nacional de Estudiantes (UNE), Bruna Brelaz, afirmó en un video en la red social Twitter que las movilizaciones para este martes están programadas en arterias y universidades del gigante suramericano.
El acto nacional fue convocado por la UNE y la Asociación Nacional de Graduados después de que el Ministerio de Educación, a principios de mes, comunicó la mutilación de dos mil 400 millones de reales (unos 460 millones de dólares) que impactaría e imposibilitaría el funcionamiento de centros superiores de estudios e institutos federales.
Según Brelaz, incluso después del retroceso del gobierno en cuanto al decomiso del presupuesto de las universidades, ante la presión de los estudiantes y de la sociedad en general, la amenaza a los establecimientos docentes superiores ganó el debate público y dejó a los alumnos movilizados.
Para las universidades resulta «inaceptable que las instituciones vivan sobre constantes recortes, sin un proyecto del ministerio y del gobierno para que las entiendan como estratégicas para el desarrollo del país», refirió la dirigente estudiantil.
Denunció que desde que asumió en enero 2019, «Bolsonaro descuidó la Educación Superior y la básica, a diferencia de lo que dice en la campaña» electoral.
En nota, la Confederación Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) alerta que el ataque a los recursos de la educación no fue solamente dirigido a las universidades, pues el total de recortes en el sector este año impactaron en todas las áreas para cumplir con el presupuesto secreto, el mayor esquema de corrupción que ha visto Brasil.
La CNTE señala que estará en las calles con los estudiantes para decir basta a Bolsonaro, quien utiliza sin pudor la máquina pública en plena campaña electiva.
«Será un día marcado por el respeto a la educación básica, profesional y superior pública. ¡Ven a las calles a participar con nosotros!», llamó el presidente de la confederación, Heleno Araújo.
De acuerdo con Brelaz, la movilización gana fuerza. «La adhesión de otras categorías y de la sociedad civil en general, actores políticos, productores de contenido en Internet y artistas es esencial para combatir los ataques y el desmonte de la educación», apuntó.
La Asociación Nacional de Posgraduados advierte que «la ciencia y educación brasileña están siendo sacrificadas por la determinación del Gobierno federal en continuar con el método de destrucción del sistema de producción del conocimiento y desarrollo científico y tecnológico».
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