Durante una reunión del comité ministerial para enfrentar epidemias, el gabinete dispuso agilizar el pago de la asistencia social a los trabajadores de los hospitales públicos y realizar pruebas de rutina a las fuentes de abasto y distribución del agua.
Encabezada por el primer ministro designado, Najib Miqati, el titular de Salud Pública, Firas Al-Abyad, insistió en la necesidad de garantizar las cuotas del año 2021 a los hospitales públicos y privados; y en ese sentido, recibió el compromiso de su homólogo de Finanzas para transferir el monto dentro de dos días al Banco de Líbano.
La autoridad sanitaria llamó a los municipios a esterilizar el agua con soluciones cloradas, en colaboración con la Cruz Roja Libanesa y el apoyo de organizaciones internacionales.
El ministro de Energía y Agua, Walid Fayyad, manifestó la prioridad en la dirección de asegurar el servicio eléctrico a los principales activos vitales de recursos hídricos, bombeo y tratamiento de residuales, para reducir cualquier riesgo futuro de propagación de la epidemia.
También expresó la disposición de reducir el uso del agua de los camiones cisterna, que «representa un peligro por la falta de vigilancia de la misma”.
Durante el encuentro, el ministro de Agricultura, Abbas Al Hajj Hassan, confirmó la realización de exámenes a los cultivos y productos en las zonas afectadas por la epidemia.
Ayer, el Ministerio de Salud Pública de Líbano anunció que cubrirá todos los gastos de tratamiento de los pacientes infectados o sospechosos de cólera en las instituciones gubernamentales.
La nación levantina enfrenta un resurgir de la enfermedad desde 1993 y hasta el momento registra casos en las regiones norteñas de Akkar, Minieh Dannieh y Trípoli; en el noreste de la Bekka; en el este de Baalbek; en el sur de Saida y en la gobernación de Monte Líbano.
Según la Organización Mundial de la Salud, el cólera es una infección bacteriana aguda que afecta el estómago y se transmite a través de las manos, el agua o el consumo de alimentos contaminados.
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