Unas seis mil 500 personas, la mayor parte dedicadas a tareas de estiba en 23 puertos del país, se sumaron a la convocatoria e invitaron a sus colegas de otras organizaciones sindicales a apoyar la huelga.
La UPCH llamó al presidente de la República, Gabriel Boric, y al subsecretario de Trabajo, Giorgio Boccardo, a cumplir los acuerdos alcanzados en anteriores negociaciones y garantizar demandas históricas del sector, entre ellas un sistema previsional para labores pesadas y de alto riesgo.
También exigen una pensión de gracia, como se le conoce a un beneficio financiero otorgado a trabajadores en situación de vulnerabilidad y que sólo puede ser autorizado por el jefe de Estado. En julio pasado los representantes de la organización gremial se reunieron en el Palacio de La Moneda con el presidente Boric y el titular de Transportes, Juan Carlos Muñoz, y les presentaron sus exigencias, pero no han recibido ninguna respuesta.
La huelga ocurre en momentos en que inicia la temporada de cruceros, hay un mayor flujo de exportación de frutas y otros productos, así como de la recepción de mercancías destinadas a las fiestas de fin de año.
mem/car/eam