“Esta reforma, esperada y postergada por más de 15 años, crea un sistema que garantizará mejores pensiones para todos y terminará con la injusta e inaceptable discriminación hacia las mujeres”, dijo Boric en cadena nacional.
Afirmó que en Chile el 72 por ciento de los retiros son inferiores al salario mínimo y uno de cada cuatro jubilados recibe un monto por debajo de la línea de pobreza, sin embargo, las AFP obtienen tremendas utilidades.
“Las AFP con esta reforma se terminan. Existirán nuevos gestores de inversión privados con el objeto exclusivo de invertir fondos previsionales, y además existirá una alternativa pública para aumentar la competencia con nuevos actores”, dijo el mandatario.
Los ahorros previsionales y las cuentas individuales mantendrán la propiedad, podrán heredarse y no serán jamás expropiados, precisó.
De acuerdo con el presidente, el sistema dará libertad para elegir donde invertir los fondos de pensiones, opción que hoy día no existe pues todos están obligados a estar en una AFP.
Para cumplir con estos objetivos, dijo, crearemos un sistema previsional mixto, basado en los principios de la seguridad social y en el que contribuyen el Estado, los empleadores y los trabajadores.
“Queremos dejar atrás un sistema extremo, que no ha sido capaz de cumplir con las expectativas puestas en él y que tiene reconocidas deficiencias”, declaró.
Reconoció que las pensiones de hoy no alcanzan a los abuelos y abuelas para tener una vida digna en su vejez, sin importar cuánto tiempo trabajaron.
El presidente hizo un llamado al Congreso a legislar con responsabilidad y diálogo, pero sin dilaciones, para poner en práctica esta reforma necesaria y urgente que lleva años postergándose.
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