En su último debate, la iniciativa fue aprobada esta noche por una amplia mayoría y de esta forma se aplicaría el principio de «quien más tiene, más paga».
El ministro de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Ocampo, reiteró en su mensaje final de agradecimiento a los representantes, a los ponentes, colegas de gabinete y los equipos del Ministerio y de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, que esta es la reforma tributaria más consensuada de la historia.
Con la reforma «se combinan dos elementos esenciales: primero, una política fiscal sólida y, en segundo lugar, tendremos los recursos adicionales para impulsar el cambio y la paz total», subrayó Ocampo.
«Esta Reforma Tributaria es una gran contribución al cambio que adelanta el Gobierno Nacional, bajo el mandato del presidente Gustavo Petro», expresó.
Reiteró que no se afectarán los colombianos en vulnerabilidad ni las capas medias de la población, como han pretendido asegurar ciertos sectores.
Con la reforma -puntualizó- se tendrán los recursos para adelantar la reforma social integral de la cual habla el Acuerdo de Paz de 2016 y que es un compromiso firme del Gobierno, y también, para ampliar programas de educación, salud, vivienda, y acueductos para los ciudadanos que hoy carecen de ellos.
«Además, se tendrán recursos para impulsar la economía popular, que es esencial para hacer el cambio profundo en la sociedad y en la economía del país», dijo.
Agregó que, si se avanza en la paz total, con los recursos que generará la reforma tributaria, el sector privado también se verá beneficiado.
Entre los aspectos centrales de la reforma sobresale que el sector minero-energético será el aportante mayoritario de recursos; el impuesto al patrimonio será progresivo y por cuatro años; un gravamen a empresas digitales extranjeras como Spotify y Netflix; continuarán los beneficios tributarios para sectores estratégicos, como la cultura, el cine, los libros, ecoturismo y el impulso a la construcción de vivienda de interés social.
Para las zonas francas se determinó que deben establecer con progresividad un plan para incrementar las exportaciones y así mantener los beneficios tributarios que gozan.
Después de 10 horas de discusión, los legisladores aprobaron con 125 votos a favor la reforma tributaria que, al decir del presidente de la Cámara de Representantes, David Racero, es la más justa y social de la historia.
El texto adoptado por la Cámara deberá ser conciliado con el aprobado en el Senado,y luego pasará a sanción presidencial para su entrada en vigor.
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