Con el boleto seguro hacia la Copa de la FIBA de 2023, ambas selecciones rivalizarán en esta capital en pos de reafirmar su paso ganador de la segunda fase, pues Nueva Zelanda lidera invicto en seis presentaciones el grupo E, escoltado por Líbano con marca de cinco victorias y un fracaso.
El conjunto Cedars llegará al desafío tras derrotar en la ventana de agosto pasado a Filipinas (85-81) e India (95-63), válido para materializar 12 años después el retorno al máximo nivel de la FIBA.
Su contrincante Nueva Zelanda aventajó a Arabia Saudita (80-65) y Jordania (100-72), para confirmar su condición de número tres de Asia de acuerdo con el ranking mundial.
Líbano, subcampeón continental de Yakarta 2022 exhibe en toda la ruta eliminatoria récord de siete sonrisas en ocho salidas, luego de despedir la primera ronda en la punta de la llave C con barridas sobre Indonesia (96-38, 110-64) y Arabia Saudita (81-68, 90-60) y división frente a Jordania (63-74, 89-70).
El quinteto libanés encarará los choques de cierre de la ventana regional de noviembre de este año y febrero de 2023 con la mente puesta en su cuarta clasificación mundialista tras a acudir a las ediciones de Estados Unidos (2003), Japón (2006) y Türkiye (2010).
Filipinas y Japón están clasificados en su condición de anfitriones, y con el boleto de Líbano y Nueva Zelanda solo quedan en disputa cuatro plazas por el continente.
Líbano, ascendió al puesto 43 del escalafón de la Federación Internacional tras la actualización en septiembre último y en tres participaciones mundialistas acumula tres triunfos y 13 descalabros.
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