En un comunicado emitido anoche, la organización de integración latinoamericana y caribeña significó que la instalación de la mesa de conversaciones, después de cuatro años de interrupción, constituye una expresión de justicia social, en paz y democracia.
La Alianza reconoció, en modo especial, el rol de Cuba y de Venezuela, comprometidos como países garantes de este proceso, en estricto apego a dicha condición de “forma responsable e imparcial”.
El ALBA-TCP hizo votos por el éxito del diálogo político en aras de avanzar en un proceso de construcción plena de la democracia y reafirmó su compromiso con todos los esfuerzos que permitan lograr la paz total “en ese hermano país”.
La ciudad de Caracas fue protagonista este lunes de la reanudación de las conversaciones de paz entre el Ejecutivo colombiano y la guerrilla del ELN.
mgt/jcd
