La víspera, la Corte Suprema de Justicia (CSJ) ratificó una sentencia a 13 años en prisión para la líder de la organización Tupac Amaru por supuesta asociación ilícita y defraudación al Estado, decisión que fue condenada por agrupaciones sociales y la Secretaría de Derechos Humanos.
Tras conocerse la disposición de la CSJ, Morales solicitó a la Fiscalía de la Provincia exigir el cumplimiento de la pena en una prisión común.
El gobernador pidió al fiscal general Sergio Lello que actúe para que me detengan. La orden ya está lista. Hoy, mañana o pasado me deben llevar a la cárcel nuevamente, señaló Sala en un video compartido en Twitter.
Además, advirtió que no se está respetando la resolución de la Corte Interamericana de Derecho, la cual determinó que se debe proteger su integridad física y psíquica, y poner fin a la persecución penal arbitraria.
En declaraciones a la emisora radial AM750, Sala señaló que la condenan porque no le perdonan “haberle enseñado a compañeros del mismo color de piel a pararse ante los que siempre les pisaron la cabeza”.
Mediante un comunicado, la Secretaría cuestionó la decisión de la CSJ y la acusó de convalidar las acciones políticas y judiciales contra la líder indígena.
Además, denunció “las violaciones groseras de las garantías del proceso que sufrió la dirigente en los tribunales de Jujuy”, las cuales consideró parte de una estrategia para proscribirla y lograr la desmovilización social.
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