En términos de llegadas de extranjeros a la nación, detalló 168 mil 932 por vía aérea hasta finales de octubre y en cruceros desde el 21 de noviembre hasta el 20 de diciembre, poco más de 17 mil pasajeros de siete barcos.
«TTL está satisfecha con el incremento del número de cruceros, especialmente teniendo en cuenta que las rutas se cerraron durante la pandemia», expresó la directora.
El alza de las escalas representa el fruto de largas negociaciones para garantizar que Trinidad sea atractiva para los mercados y las agencias de viajes adecuados, afirmó.
A la pregunta de si los índices de ocupación hotelera están empezando a recuperar los niveles anteriores a la Covid-19, Cupid respondió que están volviendo lentamente a ellos.
A medida que se acerque el Carnaval de 2023, esperamos que el país supere esos registros en año nuevo, remarcó.
Hasta ahora, noviembre marcó un nivel de ocupación del 52,1 por ciento, el más alto del año, teniendo en cuenta que nos abrimos gradualmente y eliminamos las restricciones, comentó.
La directora general interina de TTL aseguró que la mayoría de las compañías aéreas que prestaban servicios a Trinidad y Tobago regresaron desde la reapertura de las fronteras.
Algunas de Canadá y Europa ubicaron el tercer trimestre de 2023 como posible fecha de inicio, y mantenemos abierto el diálogo, adelantó.
La ejecutiva de TTL reflexionó que el turismo interno tiene el efecto no solo de proporcionar beneficios económicos al sector, sino también de desarrollar embajadores entre los ciudadanos.
Somos optimistas de cara al próximo período, sentenció mientras los casi millón y medio de habitantes cuentan los últimos días para cerrar este 2022.
Trinidad y Tobago recibió un total de 141 mil turistas dos años atrás, el sector generó alrededor de 151 millones dólares estadounidenses, lo cual significó el 0,71 por ciento de su producto interno bruto.
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