En conferencia de prensa, la ministra de Salud, Sílvia Lutucuta, informó anoche que los fallecidos son dos ciudadanos angoleños de 37 y 59 años de edad, respectivamente, que llegaron a Luanda los días 12 y 13 de marzo, procedentes de Portugal.
El país transita por la fase pre-epidémica, pues los casos positivos contrajeron la enfermedad en el exterior, por lo tanto, hay que reforzar todas las medidas preventivas para tratar de evitar la transmisión autóctona o comunitaria de la virosis, insistió la titular.
Según la doctora Lutucuta, todos los viajeros conducidos a los centros de cuarentena serán objeto de análisis de laboratorio, comenzando por los que permanecen en las instalaciones de Calumbo I y II y el hotel Victoria Garden, en esta capital.
En los próximos días se anunciarán los lugares para evaluar a los restantes pasajeros que arribaron al territorio nacional en los últimos vuelos riesgosos, señaló la funcionaria.
A partir del 27 de marzo, entró en vigor aquí el Estado de Emergencia por un período de 15 días, prorrogables de manera automática en dependencia del comportamiento epidémico de la Covid-19, lo cual incluye serias restricciones al movimiento de personas.
Sin embargo, todavía no pocos ciudadanos violan el constante llamado de las autoridades a permanecer en casa para impedir la proliferación de la dolencia; lo cual condujo al reforzamiento de la vigilancia policial para hacer cumplir las ordenanzas del estado.
En opinión de la ministra de Salud, una expansión descontrolada de la epidemia en Angola conduciría a una situación catastrófica, teniendo en cuenta las capacidades limitadas de la infraestructura nacional de salud y la insuficiente dotación de personal calificado.
Otros factores en contra, acotó, son la existencia de infecciones endémicas como la malaria, la alta prevalencia de diabetes, hipertensión arterial e insuficiencia renal, entre otras enfermedades crónicas, y la cantidad de habitantes inmunocomprometidos.
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