Barbara Mangiacavalli, presidenta de la Federación Nacional de Profesiones de Enfermería (Fnopi), señaló en declaraciones divulgadas este miércoles en el sitio digital del Servicio de Información Religiosa (SIR), que entre las principales causas de este problema están los bajos salarios.
Los sueldos de los enfermeros italianos son, como promedio, un 40,0 por ciento inferiores a los que se pagan en otros países europeos, a pesar de la enorme carga de trabajo, a lo cual se suman las pocas plazas disponibles en las universidades de esta nación para esas licenciaturas, señaló Mangiacavalli
Por tal razón, “la alarma que nuestra Federación ha estado sonando desde hace algún tiempo” pues, según dijo, resultan insuficientes los enfermeros formados en este país, y los que llegan desde el extranjero solo satisfacen un 4,8 por ciento de los actuales requerimientos.
Esa cifra última cifra es muy inferior a la de países como Suiza, donde los profesionales de esa especialidad procedentes de otras naciones cubren el 25,9 por ciento de las necesidades, mientras que en Reino Unido y Alemania, los porcentajes ascienden al 15,4 y el 8,9 respectivamente, precisó la fuente.
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