Un portavoz policial indicó, en declaraciones divulgadas este jueves en el sitio digital del canal televisivo TGCom 24, que el despliegue se efectuó principalmente en Vibo Valentia y Catanzaro, en la sureña región de Calabria, aunque también se extendió a Palermo, capital de Sicilia y la norteña urbe de Milán, en Lombardía.
La operación, coordinada por la Dirección Central Anticrimen de la policía calabresa, abarcó otras ciudades como Avellino y Benevento, en la región de Campania; Parma, en Emilia Romaña; Cuneo, en Piamonte; L´Aquila, en Abruzos; Spoleto, en Umbría y Civitavecchia, en la región del Lacio.
Francesco Messina, director de ese órgano policial, señaló en declaraciones a medios informativos que las acciones realizadas en la madrugada de hoy permitieron “desmantelar una feroz camarilla mafiosa de la ‘Ndrangheta vibonesa” y precisó que se embargaron bienes muebles e inmuebles por valor de 250 millones de euros.
En relación contra esta ofensiva contra el crimen organizado, el ministro del Interior de Italia, Matteo Piantedosi, expresó que la estrategia de respuesta del Estado en esta lucha “se ha ido perfeccionando a lo largo del tiempo”
“Italia, desde el punto de vista regulatorio, cuenta con una serie de herramientas de vanguardia que constituyen un modelo de referencia a nivel internacional, y nuestras agencias de aplicación de la ley expresan un extraordinario nivel de profesionalismo”, añadió Piantedosi.
Previamente, este miércoles, el Grupo Especial Antimafia (ROS), del Arma de Carabineros de Italia, detuvo a ocho presuntos miembros de la ‘Ndrangheta en la sureña región de Calabria.
El 16 de enero último los carabineros del ROS capturaron en la ciudad siciliana de Palermo a Matteo Messina, uno de los principales jefes de la agrupación mafiosa Cosa Nostra desde los años 90, quien estuvo 30 años prófugo de la justicia.
Messina fue junto a Bernardo Provenzando y Totó Riici, muertos en 2016 y 2017 respectivamente, uno de los tres capos de la Cosa Nostra en una de sus épocas más sangrientas, cuando esa organización asesinó al general de carabineros Carlos Alberto dalla Chiesa, en 1982, así como 10 años después a los jueces Giovanni Falcone y Paolo Borsellino, precisó la fuente.
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