La liberación tuvo lugar en una zona rural del departamento de Antioquia, señaló el CICR en una nota a la prensa.
«Agradecemos a las partes involucradas por confiar en nuestra labor humanitaria neutral. Las personas que nos entregaron se encontraban en adecuadas condiciones de salud», señaló Ignacio San Román, jefe de la subdelegación del CICR en Medellín.
Agregó que para preservar la confidencialidad con la que trabaja esa organización humanitaria y por la protección de las personas concernidas no darán más información sobre este tema”.
«Para nosotros es prioritario aliviar el sufrimiento de las personas afectadas por los conflictos armados y la violencia, esto incluye a quienes están en poder de actores armados», enfatizó.
San Román recordó a las partes en conflicto que pueden contar con sus buenos oficios para facilitar que las personas que se encuentran en su poder puedan recobrar la libertad y reencontrase con sus seres queridos.
Respetar el derecho internacional humanitario disminuye el sufrimiento humano. El CICR insiste a todas las partes en conflicto para que protejan la vida y la dignidad de las personas que no participan o que han dejado de participar en las hostilidades, señaló el texto.
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