Elbé aseguró que tomarán medidas para reforzar las comisarías y las unidades especializadas con logística y armamento, así como adoptarán otras disposiciones para apoyar a las fuerzas del orden en su lucha contra la delincuencia organizada.
El funcionario también llamó a los agentes a mantener la calma y mostrar serenidad, al tiempo que reconoció la justeza de las reivindicaciones de los uniformados que tomaron las calles el jueves.
No obstante, insistió durante una conferencia de prensa, que la solución de los problemas no está en violencia sino en la unidad.
“El país atraviesa una situación difícil. En los barrios hay grupos armados, y la policía está en el punto de mira”, admitió Elbé y lamentó que durante enero 11 policías fueron asesinados, tres sufrieron heridas y dos se encuentran desaparecidos.
El director policial rindió homenaje a la memoria de los valientes oficiales “caídos en el cumplimiento de su misión de proteger y servir a la población”, e indicó que los bandidos deben pagar por sus acciones.
Elbé prometió una respuesta institucional ante los actos de los grupos criminales, así como mejorar las condiciones de trabajo para quienes estén implicados en la lucha contra la delincuencia.
Las promesas del director policial tienen lugar dos días después de la ejecución de seis uniformados en Artibonite, al noroeste de esta capital, en enfrentamientos contra bandas y luego de rumores de que no recibieron refuerzos pese a sus peticiones.
Para denunciar ese fenómeno cientos de agentes se manifestaron en todo el país, bloquearon carreteras, levantaron barricadas y atacaron las residencias del primer ministro, Ariel Henry, y las instalaciones del principal aeropuerto del país.
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