La movilización fue convocada por siete sindicatos británicos de sectores como la docencia y el transporte, entre otros, lo cual llevó a miles de colegios a cerrar sus puertas a lo largo de la jornada, destacó la televisión en esta capital.
Durante la protesta los trabajadores expresaron su rechazo a la normativa del Gobierno de establecer una nueva ley sobre los servicios mínimos durante las huelgas, para lo cual lograron reunir unas 200 mil firmas para bloquear la medida.
Por su lado, el secretario general del Congreso de Sindicatos, Paul Nowak, dijo esperar que las protestas y huelgas sirvan para enviar al Gobierno un fuerte mensaje sobre la rabia que sienten cada vez más los trabajadores.
Según una encuesta de la empresa Ipsos, publicada durante esta jornada, más de la mitad de la población británica opina que el Ejecutivo realiza un mal trabajo para resolver los asuntos de la actualidad.
El Reino Unido se ha visto envuelto en las últimas semanas en diferentes protestas de trabajadores del sector que exigen salarios justos ante un elevado costo de vida y una inflación vertiginosa.
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