Según la investigación, el 71 por ciento de la muestra estima que la Policía Nacional (PNH) no puede restablecer la seguridad en el país, el 74 por ciento cree que tampoco puede solucionar la situación con las pandillas, mientras que el 79 por ciento opina que necesitan el apoyo de una fuerza.
La empresa que desde 2012 realiza encuestas, evaluaciones de proyectos y desarrollo de capacidades para instituciones nacionales e internacionales, entrevistó a mil 327 personas, y el 80 por ciento estimó que la Policía necesita al ejército para asegurar el país y disuadir a las bandas armadas.
En cuanto al impacto del auge de la violencia en las actividades socioeconómicas, el 83 por ciento de los encuestados reconoció una disminución de sus ingresos, el 62 por ciento interrumpió las acciones generadoras de recursos, mientras que el 28 por ciento perdió sus empleos y el 20 por ciento tuvo que abandonar sus hogares.
En octubre pasado, el Gobierno liderado por Ariel Henry solicitó el despliegue de tropas extranjeras para ayudar a la policía a enfrentar las pandillas que actualmente controlan más del 60 por ciento de la capital, y solo en el mes de enero fueron responsables del asesinato de al menos 11 policías y más de 40 secuestros.
Por su parte, Jamaica y El Salvador, dos países con experiencia en el enfrentamiento a las pandillas, dijeron estar preparados para responder al llamado de las autoridades haitianas.
La solicitud de Henry, en cambio, aún genera recelos entre organizaciones políticas y sociales que recuerdan el saldo de pasadas intervenciones militares en Haití y cuestionan el papel de países como Estados Unidos en la introducción de armas en la nación caribeña.
mem/ane