Durante un discurso esta noche dirigido al pueblo nicaragüense, el jefe de Estado explicó parte del proceso para poder sacar del país a los sancionados, quienes cometieron actos que incitaron a la violencia, al terrorismo y a la desestabilización económica.
Ortega comentó que las acciones por las que fueron detenidos tras los sucesos de 2018, fue una operación que contó con financiamiento, de lo cual se tienen pruebas.
“Embajadores europeos con su puño y letra, donde están conspirando, de la misma embajada norteamericana, de la embajadora Laura, cuando estaba la embajadora Laura Dogu, ahí están, tenemos esas pruebas”, aseguró.
El mandatario se refirió a la decisión de este jueves como un mensaje para la paz y la estabilidad, “para que el pueblo nicaragüense esté convencido de que todo lo que hacemos es para asegurar la paz”.
“Están retornando a un país (Estados Unidos) cuyos gobernantes los han utilizado para sembrar el terror, la muerte, la destrucción en Nicaragua”, resaltó le líder sandinista.
Ortega aludió a los logros alcanzados en el país a pesar de las embestidas que buscan cómo barrer con la dignidad y el heroísmo de la nación.
“Este pueblo tiene la fortaleza de librar las más grandes batallas, de enfrentar los mayores desafíos y alcanzar la paz, como esa que logramos reconquistar después de abril de 2018”, expresó.
Esta mañana, el Tribunal de Apelaciones de Managua detalló en un comunicado que los deportados estaban presos por cometer actos que menoscaban la independencia, la soberanía y la autodeterminación del pueblo.
Asimismo, subrayó que los sentenciados por diferentes ilícitos violentaron el ordenamiento jurídico y constitucional atentando contra el Estado de Nicaragua y la sociedad nicaragüense, lo cual perjudicó el interés supremo de la nación.
Fueron declarados traidores a la patria y sancionados por diferentes delitos graves e inhabilitados de manera perpetua para ejercer la función pública en nombre del servicio del Estado de Nicaragua.
Además, fueron imposibilitados de ejercer cargos de elección popular, y quedaron suspensos sus derechos ciudadanos de forma perpetua.
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