Según el comisario jefe Ronald Pierre, responsable de la estación de Mirebalais, durante las acciones ocurridas en la madrugada confiscaron un fusil AR 15 y un vehículo.
Zonas como la Meseta Central y el departamento Artibonite experimentaron en los últimos meses un auge de la violencia a manos de las pandillas que luchan por controlar territorios más amplios.
La semana pasada, un estudiante de 10 años falleció tras un ataque de grupos armados en una escuela de Liancourt en Artibonite.
Los niños tienen derecho a ir a la escuela, aprender sin miedo y obtener la protección de toda la sociedad en cualquier circunstancia, dijo en un comunicado el Ministerio de Educación que apeló a la conciencia de la comunidad.
Por su parte, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) advirtió que la violencia armada contra las escuelas, lo cual incluye tiroteos, saqueos y secuestros, se multiplicó por nueve en un año y los disturbios comienzan a paralizar el sistema educativo.
Unos 13 centros docentes fueron atacados por pandillas y durante los primeros días de este mes al menos 30 cerraron debido al aumento del crimen en zonas urbanas, mientras uno de cada cuatro permanece sin impartir clases desde octubre pasado.
También el alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, describió un sombrío panorama para la nación caribeña por el accionar de las pandillas y pidió el despliegue de fuerzas de seguridad internacionales.
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