Por Moisés Pérez Mok
Corresponsal jefe de Prensa Latina en Vietnam
A todos nos conviene conservar esta simpatía mutua y abrirle cauces mediante el comercio, las inversiones y la cooperación, escribía entonces el secretario general del Movimiento Izquierda Unida (MIU) en un reportaje especial sobre su visita a Vietnam, China y la Rep[ublica Popular Democrática de Corea publicado en Listín Diario en noviembre de 2018.
Por eso cuando encabezó recientemente la ceremonia de izamiento, por primera vez, de la enseña nacional en la flamante misión diplomática dominicana en esta capital, el también ministro para Políticas de Integración Regional, un cargo que desempeña desde 2012, subrayó que ese acto representaba un sueño materializado.
Este es un día que marca un hito en la historia de la política exterior de ambos Estados, enfatizó Mejía, quien realizó una visita de trabajo de una semana a esta nación indochina y cuyos resultados calificó de totalmente exitosos en declaraciones a Prensa Latina.
Mejía dijo haber cumplido con orgullo la noble tarea de ser el primero en izar el estandarte de su país en Vietnam, en particular por el hecho de hacerlo justo en la fecha en que se conmemora el Día de la bandera dominicana (25 de febrero) y en el contexto del aniversario 179 de la proclamación de la independencia nacional.
En un breve discurso pronunciado al término de la ceremonia, el líder fundador del MIU dijo ser portador de un mensaje del presidente dominicano, Luis Abinader, en el cual manifestó su respeto por la historia del heroico pueblo vietnamita y su interés por visitar esta nación en el corto plazo.
AMISTAD DE LARGA DATA
Ocho veces visitó hasta ahora Vietnam el máximo dirigente del MIU, quien en 2019 realizó un periplo por este país del sudeste asiático, China y la República Popular Democrática de Corea para reeditar el emprendido en 1969, en plena guerra, por el patriota y líder político dominicano Juan Bosch.
De esa gira surgió el libro “Del Caribe a las antípodas”, en cuyo prólogo el periodista español Ignacio Ramonet hace notar que “no hay, en toda América Latina, un solo dirigente político tan finamente conocedor (como Mejía) del mundo asiático”, en particular de esa tríada de países y de sus sociedades milenarias profundamente arraigadas en una larga historia.
En el volumen, Mejía señala que “ejemplares en la guerra y en la paz, los vietnamitas trataron a nuestra delegación con el afecto que une a los viejos amigos”, y recuerda que estos conservan un recuerdo de gratitud indeleble de la visita de Bosch, quien vino entonces a traerles el aliento y abrazo de otro pueblo no menos heroico.
No hay que olvidar, acotó Ramonet en el texto introductorio a “Del Caribe…”, que dominicanos, chinos, vietnamitas y coreanos resultaron todos víctimas de una agresión e invasión por parte del imperialismo estadounidense.
“Esta trágica historia compartida debe ayudar a estrechar lazos, intercambiar experiencias y construir puentes para avanzar hacia un futuro de prosperidad común”, apreció el catedrático español y recordó que Mejía empezó a recorrer esta región desde hace 30 años y estableció lazos intelectuales y de amistad con los responsables políticos al más alto nivel.
No fue sorpresa que en la ceremonia de primer izamiento de la bandera dominicana aquí el vicecanciller vietnamita Ha Kim Ngoc calificara al líder del Movimiento Izquierda Unida como un “amigo cercano y de mucho tiempo”. Subrayó además que los nexos de Vietnam con esa nación caribeña se han desarrollado de manera excelente, con fluidos intercambios de delegaciones especialmente en el canal partidista, para lo cual el MIU jugó un papel primordial.
Kim Ngoc significó asimismo que, durante su visita de trabajo, Mejía y la delegación del Movimiento realizaron numerosas actividades importantes, entre ellas un encuentro con el secretario general del Partido Comunista de Vietnam (PCV), Nguyen Phu Trong.
También visitaron las provincias de Quang Ninh y Dien Bien, dialogaron con directivos de algunas de las más importantes empresas vietnamitas y se entrevistaron con altos funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores y del PCV, con quienes renovaron un acuerdo de cooperación.
Este último, para el período 2023–2028, aboga por fortalecer y mejorar la eficiencia de los intercambios de delegación e informaciones, así como por implementar de manera flexible la colaboración en la capacitación del personal, en correspondencia con los requisitos y capacidades de las dos partes.
Fija también como tarea fundamental crear condiciones para que las empresas de los dos países amplíen la cooperación económica, comercial y de inversión.
DERROTEROS DE LA COOPERACIÓN
En diálogo con Prensa Latina, el secretario general del MIU explicó que su visita a Vietnam no solo tenía como objetivo abordar temas partidarios, sino también otros de interés del Estado dominicano.
Al respecto reveló que durante un intercambio con directivos del Grupo de Petróleo y Gas de Vietnam solicitó la contribución de éstos para que apoyen con su tecnología las labores de exploración en zonas de su país donde se ha determinado la posible existencia del llamado oro negro.
Dialogamos también con ejecutivos de la empresa Viglacera, que ya visitaron varias veces la República Dominicana y se especializa en materiales de la construcción, vidrio y cerámica sanitaria, para que se establezcan allí e inicien la producción, pues “estamos creando las condiciones para ello”, abundó.
Manifestó igualmente ser portador de un mensaje del presidente dominicano, Luis Abinader, para la corporación de la Industria Militar y las Telecomunicaciones (Viettel), en que la insta a volver a aquella nación.
Las frecuencias son del Estado y hay, por supuesto, normas y procedimientos que agotar; pero siempre que exista voluntad política las cosas pueden materializarse en el menor tiempo posible, consideró.
El líder del MIU visitó además el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural de Vietnam, pues existe interés por adquirir la vacuna vietnamita contra la fiebre porcina, una enfermedad que –apuntó – “nos ha hecho mucho daño”.
Aunque más allá de estos ámbitos, los nexos entre Vietnam y la República Dominicana deben, al decir del flamante embajador Jaime Francisco Rodríguez, continuar avanzando hacia dimensiones superiores en las relaciones diplomáticas, culturales, comerciales, académicas, deportivas, científicas y tecnológicas.
Un anhelo al cual podría dar un fuerte impulso la visita del presidente Abinader, quien manifestó ya su interés por viajar a esta nación Indochina y hacerlo en el corto plazo.
arc/mpm
