Henry visitó esta tarde la sede del Banco de la República de Haití (BRH) para expresar condolencias a los empleados tras el asesinato de un colega Eric Casséus, ocurrido el fin de semana.
Según las informaciones preliminares Casséus, regresaba de la institución en automóvil cuando los secuestradores lo atacaron, no lejos del BRH, en el centro de la ciudad. Dispararon contra su vehículo que fue alcanzado por varios proyectiles y la víctima sucumbió a sus heridas en el Hospital Bernard Mevs.
“Ha sido la ocasión de mostrarles la solidaridad y el apoyo del Gobierno. Nos solidarizamos con su dolor”, escribió el primer ministro en Twitter.
Sin embargo, mientras Henry visitaba las instalaciones del BRH, en Delmas, al este de Puerto Príncipe, decenas de personas se manifestaban para exigir la liberación de Hanze Merisma, empleado de los Archivos Nacionales ocurrido la semana pasada.
Los manifestantes quemaron neumáticos y bloquearon varias avenidas, al tiempo que recordaron que es el segundo incidente de este tipo que involucra a un trabajador de la entidad en menos de un mes.
Asimismo, los servicios de alerta reportaron este miércoles cadáveres en al menos cinco sitios de la capital mientras las incursiones de las pandillas aterrorizan los barrios y la ministra interina de Justicia, Emmelie Prophet, admitió que han perdido varios territorios.
Un perturbador balance de la Oficina del Alto Comisionado de la Naciones Unidas para los Derechos Humanos reveló que al menos 531 personas fueron asesinadas en Haití en lo que va de año, de ellas 208 en las primeras semanas de este mes.
Además, se reportaron 277 secuestros, cientos de heridos y miles de desplazados internos en Puerto Príncipe y Artibonite, los dos territorios más afectados por la violencia de las pandillas.
Ante la creciente violencia las autoridades solicitaron a la comunidad internacional el despliegue de tropas especializadas que ayuden a contener las bandas, sin embargo, aún no recibieron una respuesta concreta.
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