En reunión para evaluar la implementación del paro, el gremio rechazó el desprecio con que los interesados atienden las exigencias de los empleados, a solo dos días de anunciar las protestas.
Mediante un comunicado, Ogero renovó su adherencia a mejorar los salarios y vincularlos al dólar; así como asegurar los fondos necesarios para realizar los trabajos de mantenimiento y operación.
Denunció el deterioro de los centros y generadores de la compañía que se paran de manera automática para dificultar el servicio de telecomunicaciones en el país.
En este contexto, el colectivo presentó un estudio para asegurar las importaciones necesarias y cubrir todos los gastos con el objetivo de no agravar las condiciones de vida del ciudadano.
Ante la indiferencia política, la junta directiva enfatizó su apoyo a los derechos de los trabajadores; así como no ceder ante ninguna presión y denunciar las acusaciones sistemáticas contra el sindicato y los trabajadores en la autoridad.
Como consecuencia de la huelga, el servicio de Internet se detuvo ayer por completo en la ciudad de Hermel y en todos los pueblos del distrito, informó la Agencia Nacional de Noticias.
Medios locales reportaron otras irregularidades en alrededor de 10 estaciones, incluidas las centrales de Hazmieh, Hamra y Ras Beirut, en esta capital.
En su condición de mano ejecutiva del Ministerio de Comunicaciones de Líbano, Ogero constituye el organismo de infraestructura básica para las redes de telecomunicaciones.
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