De acuerdo con el informe preliminar, las llamas consumieron unas 200 de las poco más de siete mil hectáreas de la zona, uno de los atractivos del turismo por sus ríos, lagos y paisajes montañosos.
El intenso humo provocó que muchas familias fueran evacuadas de sus casas y los más afectados fueron los niños, que presentaron cuadros de complicaciones respiratorias, mientras que los adultos lagrimeo e irritación en los ojos.
Miembros de la Fuerza de Tarea Conjunta señalaron que se mantienen en alerta , pues aunque las autoridades han anunciado que ya se ha controlado gran parte del incendio, todavía hay áreas que siguen afectadas aunque con menor intensidad, pero el humo sigue perjudicando a las personas.
Según Efraín Gutiérrez, jefe de operaciones de los Bomberos de la Zona Regional de Veraguas, continuarán las inspecciones en el área a fin de prevenir que el incendio se reinicie.
Por su parte, el Ministerio de Ambiente destacó el trabajo con los bomberos y brigadistas para extinguir el fuego, luego de que en la mañana guardaparques y miembros de la policía ecológica lograran sofocarlo temporalmente, hasta que el viento se empezó a intensificar y la temperatura del día aumentó, incrementándose las llamas.
En la temporada seca, se registran sucesos similares en dicha zona, ya sea por personas que queman montes cercanos al área protegida o por las altas temperaturas conjugadas con las plantaciones de pino caribea, propios del sotobosque, pero altamente inflamables.
La reserva forestal La Yeguada fue creada en 1960 para conservar la cuenca alta de los ríos San Juan y Barrero Grande, sobre la vertiente del Pacífico en la Cordillera Central, una superficie de siete mil 16 hectáreas.
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