Los Acuerdos del 10 de abril de 1998 sentaron al partido Sinn Fein y a su brazo armado, el Ejército Republicano Irlandés (IRA) y formaciones unionistas a la mesa de negociaciones con las autoridades británicas, para, de paso, poner fin al despliegue de tropas del Reino Unido, comentan aquí medios de difusión.
Para este aniversario 25 de un arreglo que puso fin a casi 30 años de conflicto, con saldo de unos tres mil 500 muertos, se espera la visita del presidente Joe Biden, en medio de fuertes medidas de seguridad, con un costo de ocho millones de euros para las arcas del Ulster.
Biden, de origen irlandés, deberá asistir este martes, junto al primer ministro británico, Rishi Sunak, a una ceremonia para recordar la firma de la citada avenencia, como parte de un programa de visita de cuatro días del jefe de la Casa Blanca en la isla irlandesa.
La jefatura de la policía norirlandesa (PSNI) considera que grupos disidentes del desactivado IRA, como IRA Real, IRA Continuidad o Nuevo IRA, podrían aprovechar este lunes de Pascua católica para realizar acciones violentas, adelanta el diario The Guardian.
Más de 300 agentes adicionales debieron ser contratados para reforzar las fuerzas del PSNI durante la estancia del mandatario norteamericano, cuyo llamado a resolver la crisis del gobierno de consenso del Ulster, paralizado hace un año, fue visto por los unionistas como injerencia.
Aunque el jefe de la Casa Blanca aboga públicamente por el regreso de los unionistas del partido DUP a las negociaciones con el Sinn Fein, para retomar el ejecutivo conjunto, The Guardian comenta que la visita es apoyada mayoritariamente por los republicanos.
La inteligencia interna británica (MI5) debió retomar el nivel de grave de la amenaza terrorista y dejar atrás el de considerable, que había establecido en 2022, después de 12 años sin cambio alguno en ese aspecto, destaca la publicación.
El temor de una acción real aumentó, después de que uno de los grupos disidentes del IRA asumió la responsabilidad de un reciente ametrallamiento de un policía británico.
A Londres le preocupa, sobre todo, lo que podría ocurrir en las marchas previstas para mañana para conmemorar el levantamiento de Pascua de 1916, evento que prácticamente dio paso al inicio de la guerra del Ulster contra la ocupación británica.
En 2019, un evento similar terminó con saldo de al menos un muerto y varios heridos, tras reportarse choques entre jóvenes republicanos y la policía, durante una marcha en el barrio de Derry.
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