En la conferencia de prensa posterior al habitual Consejo de Gobierno, indicaron que el objetivo de esta línea es atender necesidades de capital de trabajo, como pagos a proveedores, plataforma 5G, suministros, contrapartidas para proyectos de inversión, mantenimiento periódico o rutinario de la infraestructura del ICE y otros gastos operativos.
La línea de crédito revolutiva tendrá un plazo de hasta cinco años, con la posibilidad de un período de gracia de dos años más, señalaron y destacaron que la misma ofrece condiciones muy competitivas, entre ellas la posibilidad de realizar desembolsos en colones (moneda tica), lo cual mitigaría el riesgo de exposición cambiaria.
El presidente del Grupo ICE, Marco Acuña, afirmó que la disposición de tener una facilidad crediticia no implica costos para su entidad y refirió que están asociados únicamente a posibles desembolsos que se realicen.
De su lado, el jefe de país del BCIE en Costa Rica, Álvaro Alfaro, sostuvo que esta operación es de gran relevancia para su institución financiera, al constituir la primera línea de crédito para una entidad pública descentralizada en Costa Rica.
«Nos complace que haya sido aprobada para el ICE, con quien mantenemos una relación histórica para desarrollar diversos proyectos de generación eléctrica, fibra óptica y plataforma 3G, entre otros, que hoy mejoran la calidad de vida de los costarricenses», subrayó Alfaro.
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