Según el mecanismo regional, para mediados de 2021 al menos 1.04 millones de salvadoreños estarán en crisis o emergencia de inseguridad alimentaria aguda, casi 400 mil más de lo previsto el pasado año.
La situación ya era amenazante para el llamado Triángulo Norte (Guatemala, Honduras y El Salvador) antes de la irrupción del coronavirus, pero el paso de las tormentas tropicales complejizó el panorama.
El SICA asegura que impulsa una respuesta multidimensional para lograr un sistema agroalimentario sostenible, para rescatar un sector golpeado por el clima adverso y las cuarentenas decretadas para prevenir contagios.
En 2021 los riesgos aumentarán porque el poder adquisitivo de las familias aún está resentido por la pérdida de empleos, porque la economía informal y el turismo siguen sin recuperarse, y por la poca demanda de mano de obra agrícola.
Para paliar la situación, el gobierno de El Salvador mantiene desde 2020 la entrega de paquetes alimenticios a nivel nacional para facilitar el acceso a productos básicos a familias afectadas por la crisis económica.
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