Esto se debe a ‘una función genética que les permite responder a gestos, contacto visual y emplear con éxito la información que proviene de las personas’, puntualizan los investigadores de la Universidad de Arizona, Estados Unidos.
Desde edad temprana los perros muestran habilidades sociales similares a las de los humanos, que tienen un fuerte componente genético.
El estudio arrojó más elementos para comprender la historia de la domesticación de los canes, en el sentido de que los animales con una propensión a comunicarse con el hombre podrían haber sido seleccionados en las poblaciones de lobos que dieron origen a los perros.
Según la revista Sciencie, la amistad entre el perro y el hombre nació en Europa hace entre 19 mil y 32 mil años, y así lo han determinado análisis genéticos realizados por científicos europeos.
Estos señalan además que fueron los cazadores recolectores los que amaestraron y domaron a las especies de lobos salvajes de las que descienden los perros actuales.
agp/joe