Más debido a que la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI) suspendió la personalidad jurídica del Movimiento Semilla, partido que alcanzara el segundo puesto en los comicios, y diera 48 horas para sacarlo de la carrera política.
El Consejo de Fiduciarios de la Fundación para el Desarrollo del país (Fundesa) se pronunció sobre esta coyuntura e indicó que se debe respetar el debido proceso.
Pidió a todas las autoridades que no se dejen llevar por presiones políticas o de ninguna índole que conlleve a que se debilite el Estado de derecho en este país centroamericano.
El Movimiento Cívico Nacional exigió que se respete el proceso electoral y se garantice la segunda vuelta del 20 de agosto próximo.
Agregó que debe prevalecer el respeto al orden constitucional para hacer valer la voluntad popular.
El Comité Campesino del Altiplano convocó a una reunión de urgencia ante la actual crisis política y el atentado a la democracia en el país.
Calificó el pronunciamiento del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de demagógico, “que pretende tranquilizar a la población, mientras siguen preparando cómo se puede atentar contra la incipiente democracia nacional”.
Observó mala intención en los sucesos recientes y afirmó que el pacto de corruptos, la alianza criminal ha estado acomodando la situación.
La Fiscalía dio 24 horas al TSE para que le quite la legalidad a un partido, por lo cual es clara la judicialización que se pretende implementar.
En medio de este panorama inquietante, la ex primera dama Sandra Torres, de la Unidad Nacional de la Esperanza, y el presidenciable de Semilla, Bernardo Arévalo, tienen luz verde para las campañas respectivas de cara al balotaje del cercano 20 de agosto.
Torres y su agrupación emitieron un comunicado en el que consideran “confusos, desconcertantes y dañinos” los acontecimientos registrados.
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