El embalse de Paso Severino llegó al cinco por ciento del caudal con tres millones 401 mil 69 metros cúbicos del vital líquido de un potencial de alrededor de 70 millones.
La mayor disponibilidad de agua disminuyó los niveles de sodio y cloruros, pues resulta menor la toma del Río de la Plata (salobre) a fin de garantizar el suministro de agua corriente a cerca de dos millones de personas.
Mientras tanto avanzan las obras para el trasvase desde el río San José al río Santa Lucía, que abastece a Montevideo y el área metropolitana.
Continúan llegando los ductos procedentes de Brasil y Argentina y la empresa Obras Sanitarias del Estado asegura que su potabilizadora de Aguas Corrientes tiene capacidad para asumir el flujo que está por llegar en unas semanas.
Pese a sus reservorios acuíferos, Uruguay vive una emergencia hídrica por la sequía que persiste desde hace tres años y afecta el suministro de agua potable en la capital y el área metropolitana.
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