El de pulmón fue responsable del 16,8 por ciento de los fallecimientos por cáncer y el ascenso de su impacto entre las mujeres lo ubica como el tercero más frecuente en ese sector poblacional.
Para los hombres es el segundo más frecuente, después del de próstata.
Datos del MSP recogen que entre 2015 y 2019 el cáncer de pulmón provocó mil muertes anuales en hombres y 380 en mujeres.
A pesar de las políticas de salud desarrolladas para disminuir el tabaquismo, la principal causa de cáncer de pulmón, las tasas de incidencia y mortalidad están entre las más altas del mundo, según datos del Registro Nacional del Cáncer.
El principal problema en relación al cáncer de pulmón radica en su diagnóstico tardío, que se da en general ante la presencia de síntomas.
Por ello el MSP elabora un proyecto para la prevención y diagnóstico precoz que permita enfrentar la enfermedad en etapa potencialmente curativa.
La iniciativa se centra en realizar una tomografía de baja dosis a personas con alto riesgo de desarrollar cáncer de pulmón en los próximos seis años, así como su seguimiento clínico realizado por equipo a cargo del proyecto.
Resulta un programa pionero en la región por las características de la población objetivo: personas de entre 50 y 74 años, fumadoras o exfumadoras, que se atiendan en la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE), más vulnerable y con mayores barreras de acceso.
La detección precoz en estas personas implicará la posibilidad de realizar un tratamiento adecuado que permita aumentar el número de casos de éxito y reducir la mortalidad por cáncer de pulmón en el país a la vez de optimizar los costos para el sistema de salud.
Tal intervención se desarrolla con éxito en Estados Unidos y Europa con apoyo de sociedades científicas, según el Ministerio de Salud Pública
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