Una declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores y Expatriados del país árabe denunció la víspera el más reciente ataque con cohetes de los grupos armados sobre el distrito Al-Manzhar, en la zona controlada por el gobierno en Hodeidah y en áreas residenciales.
Los proyectiles disparados el sábado en la mañana destruyeron en su totalidad la mezquita Al Qasim.
El texto indicó que la nueva agresión forma parte de las continuas violaciones del alto el fuego en Hodeidah y denota la escalada de las milicias en varias zonas de enfrentamiento, lo cual obstaculiza los esfuerzos internacionales para llevar la paz a Yemen.
La cancillería subrayó que la coincidencia entre los intentos hutíes de atacar la ciudad de Marib, donde residen millones de personas desplazadas, sus continuos ataques contra Arabia Saudita, y sus violaciones sistemáticas en Hodeidah, confirman que estos no están interesadas en cumplir los acuerdos ni creen en la paz.
El Ministerio del Exterior reiteró su llamado a la ONU para que reconsidere la situación de su misión en Hodeidah, al convertirse en rehén de las milicias, las cuales obstaculizan la implementación de la Resolución 2452 del Consejo de Seguridad (CS).
La declaración remarcó, además, que urge a la comunidad internacional y al CS asumir sus responsabilidades en cuanto a la implementación de las resoluciones adoptadas en ese seno.
Asimismo, demandó tomar medidas contra los hutíes, cuyos crímenes diarios ‘presagian una escalada general y socavan los esfuerzos de paz’.
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