De acuerdo con una nueva circular emitida este miércoles, la inmunización con el fármaco comenzará en octubre “junto con la campaña antigripal 2023/24” y “se utilizarán nuevas vacunas de ARNm y proteínas, con una formulación monovalente XBB 1.5 actualizada”, aprobada por Agencia Europea de Medicamentos (EMA).
Las personas se podrán vacunar siempre que hayan pasado al menos tres meses desde el último “evento”, es decir, desde la última dosis recibida, independientemente del número de refuerzos, o desde la última vez con un resultado positivo por coronavirus.
La vacuna contra la Covid-19 adquirirá un valor anual que la hará comparable a la de la gripe, aunque sean virus diferentes y los contagios con el coronavirus SARS-CoV-2 no tengan la misma estacionalidad que la influenza, agrega el documento.
De acuerdo con el último parte emitido por la máxima institución sanitaria de este país, del 4 al 10 de agosto se detectaron en Italia seis mil 56 nuevos casos de Covid-19, para un incremento del 5,7 por ciento respecto a los cinco mil 732 registrados la semana anterior.
En ese período también aumentaron las muertes como consecuencia de esa enfermedad, con 65 fallecidos, un 58,5 por ciento más que en los siete días previos, cuando sumaron 41 los decesos.
Este agravamiento de la situación se produce en medio de una flexibilización en Italia de las medidas para enfrentar el avance de la Covid-19 lo cual, según analistas, puede provocar un repunte aún más significativo en las próximas semanas.
De hecho, de manera coincidente con ese último informe, el director general de Prevención del Ministerio de Salud, Francesco Vaia, emitió una nueva circular que elimina la obligatoriedad del asilamiento para los casos positivos.
En esa disposición, emitida sobre la base de una norma aprobada en el último Consejo de ministros, del pasado 7 de agosto, se establece como simple recomendación para los infectados el uso de un dispositivo de protección respiratoria si entran en contacto con otras personas.
Si los contagiados tiene síntomas, deben quedarse en casa hasta que desaparezcan los mismos y deben evitar los ambientes concurridos, así como el contacto con personas frágiles, inmunodeprimidas, mujeres embarazadas o asistir a hospitales y residencias de ancianos.
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