Esa entidad de la ONU facilitó el movimiento de más de mil camiones con ayuda vital en medio del conflicto armando que vive el país para llegar particularmente a regiones como Darfur Oriental, Jartum, Kordofans y varios otros estados.
En medio de estas operaciones, Naciones Unidas ratificó su llamado a cesar los combates para garantizar la asisitencia a quienes la necesitan desesperadamente.
Recientemente un convoy humanitario de Port Sudan llegó a la capital de Darfur Oriental, Ad Du’ayn, con suministros médicos, de nutrición, agua, saneamiento e higiene.
El envío está conformado por artículos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y la Organización Mundial de la Salud para las personas desplazadas por el conflicto y a las comunidades que las acogen.
Otros camiones se dirigían a Nyala, la capital de Darfur Meridional, pero los enfrentamientos en esa zona obstaculizan la entrega.
Entidades de la ONU urgieron esta semana a terminar el conflicto en Sudán mientras crecen las necesidades de ayuda humanitaria y la población afectada tras cuatro meses de lucha.
El alto comisionado del organismo para los Derechos Humanos, Volker Türk, calificó el escenario como una «guerra desastrosa y sin sentido» con un impacto devastador en la vida, la salud y el bienestar de las personas.
Más de 4,3 millones de personas se vieron obligadas a huir desde el 15 de abril cuando iniciaron las hostilidades entre el ejército sudanés y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido, precisó por su parte William Spindler, portavoz de la Agencia de ONU para Refugiados.
En este tiempo, más de 900 mil refugiados y solicitantes de asilo huyeron a países vecinos y 195 mil sursudaneses se vieron obligados a abandonar la nación.
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