En una declaración pública ante la Comisión de la Verdad, el exgobernante detalló cómo descubrió este tipo de acciones que cometían efectivos militares desde hacía años, que también sucedieron cuando ocupó el cargo de ministro de Defensa (2006 y 2009) en el gobierno de Álvaro Uribe, período cuando comenzaron las denuncias.
Santos afirmó que a pesar de haber hecho todo lo humana y legalmente posible, no se logró cortar de un solo tajo los falsos positivos.
No era fácil y cambiar la cultura y el accionar de cualquier institución toma tiempo, es difícil, sobre todo cuando se trata de instituciones tan conservadoras como las Fuerzas Armadas, afirmó el exgobernante.
‘Creo, sin embargo y sinceramente, que el objetivo fundamental de acabar con los falsos positivos se logró. Pero me queda el remordimiento y el hondo pesar de que durante mi ministerio muchas, muchísimas madres (…) perdieron a sus hijos por esta práctica tan despiadada, unos jóvenes inocentes que hoy deberían estar vivos. Eso nunca ha debido pasar’, agregó.
En su extensa declaración expresó que el Ejército, en algún momento, debe decirle a Colombia y al mundo que permitieron que esto sucediera y aunque no era la doctrina lo permitieron y por eso pidan perdón
‘Con este reconocimiento no pretendo minimizar la gravedad de lo que pasó en Colombia entre el 2002 y el 2008. Cuando miembros de nuestro Ejército violaron su juramento de proteger la vida de los colombianos y se convirtieron en sus asesinos», subrayó.
La presión por producir bajas y los premios por lograrlo fueron, sin duda, los incentivos para generar lo que vino después, dijo al referirse a las miles de víctimas que contabiliza la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
También relató sus diferencias con el expresidente Álvaro Uribe sobre la conducción de la guerra cuando ocupó el cargo de ministro de Defensa.
En 2012 comenzaron los diálogos de paz en La Habana, Cuba, entre el gobierno de Santos, en representación del Estado y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y luego de cuatro años de pláticas, lograron poner fin a un viejo conflicto armado con la firma del Acuerdo de Paz.
Los llamados ‘falsos positivos’ están catalogados como un crimen de lesa humanidad, y aunque se trata de un fenómeno que en Colombia ocurría incluso desde 1978, en 2008 ocuparon el foco de la opinión pública tras el hallazgo de los cadáveres de 19 jóvenes desaparecidos y fueron presentados por el ejército como guerrilleros muertos en combate.
Las fuerzas militares de Colombia asesinaron al menos a seis mil 402 civiles entre 2002 y 2008 y los presentaron como ‘bajas en combate’, según la JEP.
La Comisión de la Verdad fue creada en 2017 en el contexto del Acuerdo Final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera.
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