De acuerdo con una nota del Ministerio de Salud, divulgada este viernes en el sitio oficial de ese organismo, se encuentran en máxima alerta las urbes de Bari, Bolonia, Bolzano, Brescia, Campobasso, Florencia, Frosinone, Latina, Génova, Milán, Nápoles, Perugia, Rieti, Roma, Turín, Trieste, Venecia, Verona y Viterbo.
En alerta naranja están Ancona, Messina y Palermo, mientras que la amarilla se aplicó a Catania, Civitavecchia, Pescara y Reggio Calabria.
De acuerdo con los pronósticos de los expertos, publicados en el sitio digital informativo especializado Il Meteo.it, a partir del sábado 26 de agosto el anticiclón comenzará a debilitarse en el norte, dejando lugar a un clima inestable y variable, caracterizado por intensas tormentas en los Alpes y las llanuras.
El 27 de agosto se espera la cuarta perturbación del mes, lo que traerá mal tiempo con un descenso significativo de las temperaturas en las regiones del noroeste, donde la columna de mercurio bajará hasta unos 25 grados centígrados, y a partir del próximo lunes 28 estas tormentas también afectarán regiones del Centro, Campania y Cerdeña.
No obstante, el sábado amanecerán en alerta roja las ciudades de Ancona, Bari, Bolonia, Bolzano, Brescia, Campobasso, Florencia, Frosinone, Latina, Messina, Milán, Nápoles, Perugia, Rieti, Roma, Trieste, Venecia, Verona y Viterbo.
El domingo ese máximo nivel se aplicará solamente a ocho urbes, incluidas Ancona, Bari, Campobasso, Florencia, Frosinone, Messina, Palermo y Roma, agrega el boletín sanitario.
En los últimos días de agosto se espera una atmósfera aún inestable, con precipitaciones dispersas, y los meteorólogos coinciden en que para los primeros días de la próxima semana se producirá un descenso generalizado de las temperaturas, incluso algunos grados por debajo de la media del período, lo que hará que el clima sea fresco.
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