En una carta abierta publicada por el diario Página 12, el activista y defensor de los derechos humanos criticó a los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Maqueda y Ricardo Lorenzetti por no escuchar a los participantes en una marcha conocida como el Malón de la Paz.
Integrantes de pueblos como el atacama, quechua, humahuaca, ocloya y guaraní, arribaron a esta capital el 1 de este mes y acamparon en la plaza Lavalle, frente a la sede de la CSJ, para denunciar la violencia e irregularidades del gobierno de la provincia de Jujuy.
Los participantes en la iniciativa condenan la violación de sus derechos y el uso de la fuerza contra quienes se opusieron a las políticas del gobernador Gerardo Morales y a una reforma de la constitución de ese territorio.
Según Pérez Esquivel, los cambios en los estatutos locales transgreden y no respetan la Carta Magna argentina, violan el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo sobre Pueblos Indígenas y Tribales y la Declaración Universal de los Derechos de esas comunidades promulgada por la Organización de las Naciones Unidas.
Entre los aspectos que generaron mayor descontento se encuentran la criminalización de la protesta social y el control sobre las tierras y el agua.
El proceso de reforma incumplió las normativas para asegurar el acceso a la información y participación ciudadana en materia ambiental, indicó el Premio Nobel.
La convocatoria de la Constituyente estuvo afectada por irregularidades, entre estas las licencias del gobernador para ejercer a la vez como presidente de ese organismo, añadió el también titular del Servicio de Paz y Justicia.
Además, refirió que las organizaciones sociales no pudieron expresar sus opiniones y los cambios fueron aprobados en menos de tres semanas.
Morales impuso el texto sin consulta alguna, violó derechos y cuando aparecieron los reclamos populares respondió con represión policial y la persecución a docentes y comunidades indígenas, aseveró.
Habilitó métodos de la última dictadura militar (1976-1983) como la persecución ideológica, las detenciones arbitrarias, allanamientos domiciliarios sin orden judicial y grupos de tareas civiles, agregó. Pérez Esquivel aseguró que los miembros del Malón están en esta ciudad para reclamar el respeto a sus derechos, evitar la violencia, la discriminación, el racismo y la intolerancia.
Ustedes tienen la obligación de escucharlos y protegerlos. Espero que actúen con verdad y justicia. A 40 años del retorno a la democracia, honren el Nunca Más que supimos conseguir, concluyó.
mem/gas