El permiso, requisito para que los jefes de Estado salgan del país, fue aprobado por 71 de los 130 congresista, frente a 39 votos en contra, de legisladores que consideraron que la mandataria debe permanecer en el país, y dos abstenciones.
La resolución legislativa autoriza a la mandataria a ausentarse del 17 al 21 de septiembre, lapso en el que hablará en la asamblea general el día 19.
Sostendrá admás reuniones con sus homólogos de diversos países asistentes a la magna reunión y con altos funcionarios del sistema de las Naciones Unidas, añade
El documento no consigna actividades con miembros del gobierno de Estados Unidos.
Durante la ausencia de la mandataria no habrá ningún encargado del despacho presidencial en Lima, en virtud de una polémica ley que autoriza a quien ejerce la presidencia a gobernar a distancia, en este caso en contacto con el primer ministro, Alberto Otárola.
La norma fue dictada debido a que, tras asumir Boluarte desde la vicepresidenta como sucesora del destituido Pedro Castillo, no hay otro que se encargue de su despacho conforme manda la constitución.
En opinión de la mayoría de constitucionalistas, la norma contradice esa disposición y la que determina que el presidente gobierna en forma presencial, aunque el Parlamento, de mayoría aliada al Ejecutivo, consideró que era necesario llenar un vacío de la carta magna.
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