«En el Congreso de la República rendimos homenaje a la vida y obra del maestro Fernando Botero, ícono del arte latinoamericano. En su legado podemos encontrar parte de nuestra historia, nuestra cultura, de nuestras alegrías, anhelos, dolores y horrores. Abrazamos a su familia», expresó la senadora del Pacto Histórico María José Pizarro.
De igual forma, la congresista Clara López, destacó que Botero «enalteció el nombre de Colombia a través del arte y su legado vivirá para siempre».
«Gracias maestro por su arte, por su legado, traducido en la paz», expresó la senadora del Partido Comunes Sandra Ramírez, quien aseguró que el más grande los artistas de la plástica en Colombia será un referente para las artes y la juventud.
El recinto del Congreso, donde desde el jueves pasado se lleva a cabo el velorio del artista, Lina, la hija de Botero, manifestó muy conmovida, en nombre de su familia el más sentido agradecimiento por la acogida a lo largo de estos cinco días.
«Más de 20 mil personas de todos lo estratos sociales entraron al capitolio y desfilaron por este salón para rendir respetos a mi padre y despedirse de él, con amor, con ternura, con agradecimiento», enfatizó.
Lina aseguró que se cumplió el deseo de sus hijos y de su padre de regresar a su tierra natal, al país que tanto amaba y que siempre llevó inscrito en su corazón.
«Agradecemos también el gesto del gobierno de haber traído del Palacio de Nariño (sede de la presidencia) la Paloma de la Paz para velar los restos mortales de mi padre: ese regalo que le hizo al país como símbolo de la paz que él tanto anheló para nosotros los colombianos», resaltó.
Subrayó que ella y sus hermanos Juan Carlos y Fernando se comprometieron en preservar, proteger y difundir su obra en todos los rincones del mundo.
«Nos queda su ejemplo como ser humano, su grandeza, su generosidad, su sensibilidad hacia las necesidad de los demás (…), pero ante todo nos queda su sencillez», dijo entre lágrimas.
Tras estos días de honras fúnebres, se celebró una misa de honores fúnebres del maestro Botero en la Catedral Primada, en el centro histórico de Bogotá, a la que asistió el presidente de la República, Gustavo Petro.
Posterior a la ceremonia, el féretro del maestro será llevado al Museo Botero, ubicado en La Candelaria, centro histórico y cultural de Bogotá.
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