Los acompañaron los expresidentes de Colombia, Ernesto Samper, y de Bolivia, Evo Morales, así como el jurista español Baltasar Garzón, integrante activo del grupo.
Céspedes dio la bienvenida a las personalidades invitadas de 21 países y calificó el encuentro como el foro de una lucha importante por la integración, la unidad y contra la desigualdad, y dijo que en esos terrenos hay mucho que avanzar todavía.
Enríquez-Ominami informó que todavía están llegando a México los expresidentes invitados, algunos ya en el país, y mencionó los mensajes enviados por presidentes como Alberto Fernández, de Argentina, y Luiz Inacio Lula da Silva, de Brasil.
Agradeció al gobierno de México y en particular al de Puebla que se realice este encuentro en el lugar en el que nació el grupo hace cuatro años.
Por su parte, el expresidente colombiano Samper habló en su condición de coordinador de Unasur e hizo una alerta sobre la necesidad de integrarnos en la región pues de lo contrario será muy difícil superar la crisis que afecta a todos los latinoamericanos y caribeños.
Les pidió a esos pueblos reencontrarse consigo mismos y ampliar y fortalecer a este grupo con un enfoque en materia de igualdad, libertad, unidad e integración para el desarrollo, que fueron objetivos del primer llamamiento que le dio origen, pero ahora con más razón pues el mundo convulsiona.
En cinco años, dijo, hemos padecido de todo, un deterioro de las relaciones internacionales, desafíos a la capacidad de los gobiernos para dar respuestas a demandas sociales y fuimos las principales víctimas de la Covid-19 al poner la mayor cantidad de muertos por la situación económica degradada.
Ahora, dijo, tenemos la guerra en Ucrania que genera inflación y escasez de alimentos y se roba grandes recursos financieros que pudieran ser utilizados para el bienestar en lugar de afectar el suministro de combustible y crear crisis alimentaria.
Habló del cambio de época con una desglobalización en el mundo la cual genera la necesidad de buscar otros caminos en las relaciones internacionales, de allí la trascendencia de más integración y multilateralismo, y esos son temas en los que nos concentraremos en este encuentro del grupo.
Reveló que en estos días de debate se analizarán propuestas sobre la base de tres ejes principales: fortalecer la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac) enfocada hacia un nuevo mundo político, considerar a la Unasur como parte parte de la familia latinoamericana y caribeña, que se extienda a toda la región, y finalmente, hacer énfasis en los procesos de integración económica, política, social, cultural pues de lo contrario nos morimos.
Esa integración, dijo, pasa necesariamente por la creación de una nueva arquitectura financiera la cual vamos a proponer mañana, con bancos regionales sin intervención de depredadores como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, y sin ninguna condicionalidad.
Estamos hablando, dijo, de una nueva estructura de alianzas estratégicas que puede incluir a otras regiones como Asia.
Samper cuestionó a fondo la inmoralidad, ilegalidad e inconveniencia de la política de sanciones que imponen Estados unidos y la Unión Europea, como sucede con los casos de Venezuela y Cuba, esta última víctima de un bloqueo de más de 60 años que el pueblo enfrenta heroicamente.
Por su parte, Evo Morales refrendó las palabras y observaciones de Samper y añadió que ese panorama descrito por su colega colombiano demuestra que hay una crisis significativa en el sistema imperial de Estados unidos y en genera del modelo económico y social que lo sustenta.
Llamó a una defensa de la plurinacionalidad, a la unidad y a la defensa de la soberanía política, social, cultural y económica y seguir la batalla contra las transnacionales para que dejen de saquear a los países, y respeten la dignidad de nuestra diversidad y de nuestra identidad.
Baltasar Garzón dijo por su parte que está en el grupo en su condición de jurista para denunciar las ilegalidades y violaciones del derecho internacional por parte de Estados unidos, la Unión Europea y la OEA bajo el liderazgo de Luis Almagro, en particular el régimen de sanciones extraterritoriales como el bloqueo a Cuba.
lam/lma