Abinader indicó en conferencia de prensa que si en Haití hay una acción militar, República Dominicana tiene que protegerse.
«Quizás puede haber alguna flexibilización desde el punto de vista comercial, pero no desde el migratorio, por razones de seguridad nacional», declaró el gobernante.
Sobre la inestabilidad en la frontera y su cierre indicado por su Gobierno hace poco más de dos semanas, señaló que el presupuesto para las Fuerzas Armadas se incrementó en 15 por ciento en relación con 2022 y se aplicaron incentivos especiales al personal que labora en esa zona.
Precisó que en los próximos dos meses llegarán al país cuatro helicópteros de dos turbinas cada uno, en tanto se trabaja en el ensamblaje de más aviones de la Fuerza Aérea para el Comando Sur que se instaló en la provincia Barahona (suroeste) y más buques para la Marina de Guerra.
El presidente reiteró que su Gobierno está abierto al diálogo con Puerto Príncipe, y desea que se actúe con base en la justicia y bajo la legalidad.
El 14 de septiembre pasado el jefe de Estado anunció el cierre total de la frontera con Haití, tanto por vía marítima, como terrestre y aérea Y suspendió la emisión de visados a ciudadanos haitianos hasta nuevo aviso.
Abinader aseguró en ese momento que el Ministerio de Defensa está preparado, junto al Ejército Nacional, la Armada y la Fuerza Aérea para cumplir con esa disposición, a partir del conflicto creado por la construcción en suelo haitiano de un canal para desviar las aguas del río Dajabón, que comparten las dos naciones.
La víspera el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas dio luz verde a la fuerza multinacional de apoyo a Haití, en respuesta a una solicitud del primer ministro de ese país, Ariel Henry.
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