Según el vocero de la cancillería iraní, Saeed Khatibzadeh, Teherán rechaza cualquier interferencia en sus programas pacíficos nucleares o de misiles y en cuestiones relacionadas con su política militar.
Así, respondió a la declaración final de una reunión de ministros de Relaciones Exteriores del CCG, la cual estimó contiene un enfoque poco constructivo.
Sin mencionar quien o quienes, el portavoz calificó de doble rasero las posiciones de algunos integrantes de esa entidad subregional que por un lado tratan de mejorar relaciones con Irán y por el otro, emiten críticas.
A juicio de Khatibzadeh, el consejo es rehén de la avaricia de políticas fallidas relacionadas con una ruidosa minoría de esos países.
Irán nunca violó las leyes internacionales ni sus obligaciones y, por lo tanto, no tolera intervención externa alguna en su derecho a desarrollar tecnologías nucleares o establecer sus políticas de defensa.
En cualquier caso, agregó, es mejor que esos Estados cumplan con sus obligaciones en las organizaciones internacionales, incluido el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Al afirmar que Irán considera que interactuar y cooperar allanaría el camino a soluciones, Khatibzadeh dio la bienvenida a iniciativas positivas para promover relaciones basadas en principios y reglas.
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