Desde 1996 la Comisión Internacional del Huevo promovió la creación de esta fecha para recalcar la enorme importancia de este alimento de elevado valor nutritivo.
El tema de 2023 es «Huevos para un futuro saludable», destacando su poder nutricional y su potencial para combatir las deficiencias de nutrientes en todo el mundo.
Son considerados una proteína de alta calidad por excelencia y poseen muchas propiedades y beneficios, pues contienen vitaminas y minerales que contribuyen al bienestar físico y mental, reduciendo el riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares.
Previene afecciones visuales, como las cataratas y la enfermedad macular generada por la edad, gracias a los carotenoides (luteína y zeaxantina) que contiene la yema.
Ayuda a combatir el sobrepeso, contiene solo 75 calorías y contribuye al desarrollo del cerebro, favoreciendo la memoria y el aprendizaje, debido a la colina y luteína.
Es importante consumirlo durante el embarazo, optimizando al desarrollo del cerebro y la médula espinal del feto y previene la pérdida de masa muscular, especialmente en adultos mayores.
El grosor de la cáscara del huevo depende de la edad de las gallinas, pues las más jóvenes los ponen con cáscaras más duras, mientras los de las longevas son más blandos.
La diferencia en el color de la cáscara obedece a razones genéticas y los de color oscuro provienen de las razas más grandes.
El color de las yemas varía de acuerdo a la alimentación y cría de las ponedoras.
Igualmente, el huevo contiene vitamina D, esencial para mantener los huesos fuertes, ayudando al cuerpo a absorber el calcio de los alimentos y los suplementos.
La clara y la yema poseen la misma cantidad de proteína, pero la segunda posee 60 calorías y la primera solo 15 aproximadamente.
El huevo se usa para preparar alimentos, como salsas, postres y platos elaborados y como ingrediente para alimentos de animales, por su calidad nutricional.
A su vez, el calcio que posee la cáscara es probado en pacientes con problemas renales, que requieren dietas bajas en fosfatos.
La clara del huevo contiene lisozima, una proteína usada para la conservación de algunos alimentos y frenar el desarrollo de bacterias en quesos, vinos, vegetales y frutas.
Se emplea en la elaboración y aplicación de mascarillas faciales y capilares caseras e industriales y puede actuar como pegamento de papel o cartón ligero.
La cáscara de huevo añadida al abono es un excelente nutriente para las plantas. mem/abm
