“Quiero trasladar todo mi cariño y todo el respaldo del Gobierno de España y de la sociedad española a nuestro secretario general de Naciones Unidas, que creo que lo que está haciendo es alzar la voz de una mayoría amplia de las sociedades del mundo que quieren una pausa humanitaria en el conflicto”, dijo Sánchez.
Se refería así a la polémica desatada por Israel al exigir la dimisión de Guterres, tras sus
sus comentarios ante el conflicto en el Medio Oriente en torno a la actuación de Hamás.
Guterres expresó en el Consejo de Seguridad de la ONU que el ataque terrorista de Hamás del 7 de octubre ‘no viene de la nada’, sino de 56 años de ocupación’.
Sánchez, que encabeza actualmente la Presidencia del Consejo Europeo, hizo sus declaraciones a periodistas en Bruselas, a donde llegó este miércoles para tomar parte en la cumbre social tripartita que antecede a un encuentro de de líderes del bloque comunitario.
El jefe del Ejecutivo español consideró que Guterres alza la voz de una mayoría amplia de las sociedades del mundo que quieren que se ponga fin al ‘desastre humanitario’ que está provocando el conflicto.
Al mismo tiempo, Sánchez reiteró su espaldarazo a que haya un alto el fuego humanitario en Gaza que permita la entrada urgente de ayuda ‘de manera sistemática, permanente y proporcionada a las necesidades de la población’.
El ministro israelí de Exteriores, Eli Cohen, canceló una reunión que tenía con Guterres, a quien pidió su renuncia.
Por su parte, el secretario general de la ONU apuntó que se siente ‘asombrado por las tergiversaciones de algunos’ con respecto a esas palabras sobre Hamás, cuyas acciones ha vuelto a condenar.
Sánchez apeló de forma reiterada a la vía diplomática para intentar rebajar la escalada del conflicto y se reunión en Madrid con los embajadores de Palestina e Israel por separado.
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