Mediante una trasmisión por las redes sociales, el alcalde de la demarcación, Enrique Cubur, junto a una representación de los más de 30 grupos involucrados, detalló que los ejemplares a exhibir necesitan postes de gran magnitud.
En tales condiciones, explicó, descartaron exponer a los vecinos y barrileteros sobre esas estructuras, como también las creaciones, en las cuales utilizan papel de china, sumamente frágil para soportar ni un minuto bajo la lluvia.
El jefe edil señaló que el lugar para volar las “magníficas obras de arte” está totalmente saturado de agua a causa de la tormenta tropical Pilar, y si las precipitaciones no cesan en las próximas horas, será difícil acondicionarlo.
Al ser preguntado sobre la nueva fecha de exhibición, el alcalde respondió que cuando existan mejores pronósticos climáticos informarán con anticipación, para que los turistas locales e internacionales visiten el municipio. El Instituto Guatemalteco de Turismo (Inguat) estimó alrededor de 40 mil extranjeros en el Festival de Barriletes Gigantes de Sumpango y 16 mil en el de Santiago, ambos de Sacatepéquez.
Estos dos eventos constituyen las principales atracciones del país en este Día de Todos los Santos, aparte de comer fiambre en memoria de los difuntos y otras muestras de celebración.
El presidente del Comité Permanente de Barriletes de Sumpango, Julio Asturias, pronosticó la llegada de más 130 mil personas, al contabilizar también el flujo de su población y de visitantes nacionales.
La oportunidad permite disfrutar también en el lugar de música tradicional, bailes folclóricos y degustar la deliciosa gastronomía chapina.
El Gobierno guatemalteco presentó en 2021 ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura la nominación de la técnica de Barriletes Gigantes como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Las familias y asociaciones de artesanos construyen los espectaculares cometas casi exclusivamente de bambú y papel de seda, con varios meses de anticipación para determinar el tamaño, diseñar los adornos y motivos diferentes.
La esperada y única celebración cumple 45 años de exaltar la cultura y el arte, una forma de expresar el más profundo sentir de los lugareños mediante los cometas al viento, enlace de los vivos con sus muertos.
La cosmovisión maya sugiere que este día las almas de los antepasados son liberadas por 24 horas para volver a sus hogares, de ahí que las familias esparcen flores en las casas, colocan ramilletes en ventanas para guiarlas en el camino de vuelta, entre otras.
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