De acuerdo con las fuentes, un almacén y dos posiciones del ejército sirio usadas también por milicias aliadas fueron bombardeadas en las cercanías de la calle Bor Saeed y cerca del aeropuerto al este de la ciudad de Deir al Zour, a unos 500 kilómetros al nordeste de Damasco.
Según el secretario norteamericano de Defensa, Lloyd J. Austin, la acción fue realizada por órdenes del presidente Joe Biden, mediante dos cazas de combate F-15, y fue en respuesta a una serie de ataques contra personal estadounidense en Iraq y Siria.
El 30 de octubre pasado, una agregión similar apuntó contra un convoy de camiones procedentes de Iraq, en la localidad fronteriza de Albukamal en la misma gobernación de Deir Ezzor.
Mientras, el 26 de octubre un ataque del Pentágono fue contra dos puntos del ejército sirio y sus aliados en la localidad de Al-Mayadeen.
Washington mantiene una quincena de bases en territorio sirio sin el consentimiento del Gobierno de Damasco ni la aprobación de las Naciones Unidas.
Siria denunció repetidamente esta presencia, la que calificó de ocupación, y aseguró que la actuación de los militares estadounidenses en el territorio nacional incentiva la actividad terrorista y apunta a desestabilizar el país y saquear sus riquezas.
Por otro lado, los ataques contra esas bases aumentaron notablemente desde el comienzo de la agresión israelí contra la Franja de Gaza y causaron lesiones a al menos 45 militares estadounidenses.
jf/fm